Bizcocho
de chocolate relleno de mermelada de moras cubierto de buttercream de moras.
De
esta layer hemos dado cuenta entre unos amigos una tarde de verano. Y
el porque del ingrediente principal es muy sencillo: hace dos días que
ha ido Carla con los abuelos de Madrid, mis padres, a dar un paseo por
el bosque y han vuelto con una bolsa entera de moras. Y os podeis
imaginar en lo que las ha convertido mi madre, ¿no? Pues sí, en una rica
mermelada casera de moras, que había que probar inmediatamente. Y este
es el resultado.
La
mermelada es brutal, no os imaginais una tostada untada para desayunar.
Y si le preguntas a Carla por el paseo te puede estar contando
historias hasta que te aburras. Se lo pasaron genial, y lo orgullosa que
llegó ella con su bolsa llena entera...